De las decenas de miles de artefactos que se exhiben en el Salón de la Fama de Cooperstown, pocos pertenecen a mujeres y menos aún a peloteros de ligas menores. Sin embargo, la hazaña de una niña originaria de Florida hizo que en 2012, los directivos del museo decidieran exhibir el jersey de una niña pitcher de 15 años que lanzó dos juegos perfectos en una temporada.

Chelsey Baker juega béisbol y lo hace contra varones. Ahora tiene 17 años y lanza en el equipo de su preparatoria. Le llaman la «Princesa de la Bola de Nudillos» porque ese es el lanzamiento estrella de su repertorio. Tuvo la suerte de que Joe Niekro le enseñara a tirarlo de niña y luego Tim Wakefield le ayudó a perfeccionarlo.

Su carrera en ligas pequeñas fue impresionante. No ha perdido un solo juego desde que empezó a jugar béisbol y llegó a ser considerada la mejor jugadora de ligas pequeñas del país, contando a los niños. Gracias a su talento ha viajado por todo el territorio de los Estados Unidos y a Asia, donde es toda una celebridad.

En Japón apareció en portadas de revistas y en la televisión. También le ofrecieron un contrato para jugar profesionalmente, pero antes quiere terminar la preparatoria y jugar béisbol a ese nivel. Tal vez en un par de años la veamos elegida por un equipo de MLB en el draft de primer año. Esta temporada tiene tres juegos salvados en 19 apariciones y un PCLA de 0.74, nada mal para una niña.

Anoche Chelsey se enfrentó a peloteros de otro nivel, pues lanzó durante la práctica de bateo de los Rays de Tampa Bay. Le fue tan bien, que ponchó a Evan Longoria y a David Price. Al final, Joe Maddon elogió su desempeño. «Estuvo extraordinaria, tiene un gran brazo y lanza una bola de nudillos que tiene mucho movimiento. Sabe lo que está haciendo y tiene gran compostura.»

La pregunta es ¿podría llegar Chelsey a MLB? Por lo pronto, habría que modificar un veto que impuso hace 61 años el Comisionado de Béisbol Ford Frick, quien invalidó el contrato de otra lanzadora, Eleanor Engle, para jugar con los Senadores de Harrisburg. El Comisionado amenazó a los equipos con imponer severas sanciones por firmar mujeres, a quienes llamó «travestis» ¿Qué tal?